Se
une al vértice V del cono con dos puntos cualquiera de la recta m
(M,N); se formarán así dos rectas que intersectan en X e Y
al plano que contiene la directriz.
La
recta que une a X con Y cortará a la directriz en puntos de intersección
buscados (1 y 2). Este método es aplicable también a la intersección
de recta con pirámide.
Por
dos puntos cualesquiera de la recta, se trazan paralelas a la generatriz;
estas paralelas cortarán al plano que contiene a la directriz en
X e Y.
La
recta que une a X e Y cortará a la directriz en puntos (1', 2'y 3'),
por los cuales pasan las generatrices que cortan a la recta dada en los
puntos buscados (1,2,3).
Cualquier
intersección entre recta y superficie cónica o cilíndrica,
puede hallarse tomando como plano de canto cortante a una de las proyecciones
de la recta.
Trazando
un número conveniente de generatrices, el plano cortante asumido
las cortará en puntos X que forman una curva en la vista adyacente.
La intersección de dicha curva con la recta dará la solución
buscada.
La
curva de intersección obtenida es una sección plana del cono
o del cilindro.
En
cualquier vista, se considera a la proyección de la recta como plano
de canto cortante mediante una vista adyacente paralela; la sección
producida por este plano de canto se mostrará en V.M. y aparecerá
como una circunferencia concéntrica a la esfera. Dicha circunferencia
cortará a la recta en los puntos buscados (1 y 2).
La
circunferencia de intersección obtenida es una sección plana
de la esfera